martes, 31 de marzo de 2009

Una empresa muy familiar


Ante una necesidad cada vez más urgente de renovar la política, inquieta ver la falta de espacios reales de los jóvenes para entrenarse en estas arduas lides. Con la negativa general de los políticos a dejar sus cargos -salvo honrosas excepciones-, preocupa aún más que los pocos cupos disponibles sean ocupados por familiares de los políticos.


Imagínate que en un examen de tu carrera, te preguntaran: ¿Qué tienen en común Eduardo Frei y Sebastián Piñera, además de ser políticos los dos?, ¡¡Paapaayaa!! Exclamarías con júbilo… Tienes razón. Demasiado fácil. Compliquémoslo: Eduardo Frei, Sebastián Piñera, Carolina Tohá, Ricardo Lagos Weber, Mariana Aylwin, Ignacio Walker, Andrés Allamand, Soledad Alvear, Guido Girardi Lavín, Juan Pablo Letelier, Evelyn Matthei, Carlos Ominami, Adolfo Zaldívar, Isabel Allende, Marcela Cubillos, Marco Enríquez-Ominami, Ramón Farías, Guido Girardi Brieba, Joaquín Godoy, Juan Carlos Latorre, Claudia Nogueira, Fulvio Rossi, Ximena Vidal, Patricio Walker, Gutenberg Martínez, Ximena Rincón y Cristina Girardi, aparte de ser todos políticos ¿qué tienen en común? Ja ja ¿Se complicó?


¿Son todos de Gobierno? preguntaría algún desinformado. No. ¿Todos son parlamentarios? Menos. ¿Todos a favor de la inscripción automática? Tampoco. ¡¡Me doy!!, diría compungido Kiko, el sempiterno vecino del Chavo del Ocho. ¿Pero qué tienen en común? Son todos “hijos de”, “padres de”, “hermanos de"o “(ex)parejas de” de algún otro político de alta visibilidad. “¿Nepotismo en la política?”, cuestionaría algún suspicaz.


Según el Sr. Wikipedia – asesor personal de muchos estudiantes y algunos parlamentarios-, “el nepotismo es la preferencia que algunos gobernantes o funcionarios públicos tienen para dar gracias o empleos públicos a familiares. En países donde se practica la meritocracia su uso es generalmente negativo y se considera corrupción, mientras que en países más pequeños y donde las relaciones personales son más estrechas es un factor clave para la designación de cargos de confianza”.


Baja participación juvenil


La participación electoral ha descendido en los jóvenes entre 18 y 29 años, desde el 30% del padrón electoral (1992) hasta un 7,6% (feb 2008). ¿Y el boom de inscritos de este año? Importante, pero no suficiente. Porque el votar no basta para producir un acercamiento a la política, sino que se requiere participación y desarrollo de asociatividad con otras personas. Por eso, organizaciones ciudadanas como Independientes en Red, Política Stéreo, Giro País, o numerosos grupos en Facebook son mucho más eficientes en captar adeptos que los partidos políticos.


La democracia es el sistema preferido por los jóvenes chilenos, pero la mitad de éstos se declara insatisfecha con su funcionamiento. “De acuerdo a la Quinta Encuesta Nacional de Juventud, el 50.1% de los jóvenes está muy insatisfecho o nada satisfecho con la forma como opera la democracia en Chile”, sostuvo Juan Eduardo Faúndez, Director Nacional del INJUV.

El 87% de los parlamentarios que concluyen su mandato este año pretende mantenerse en el Parlamento. De ellos, 17 están en forma interrumpida en el Congreso desde 1990. Dentro de poco, el reloj biológico comenzará a correr con urgencia para un recambio político. Se necesitará de gente nueva, que no habrá podido desarrollarse por falta de espacios. Por eso, las miradas comienzan a enfocarse en las nuevas generaciones.

Comandos presidenciales

Frei y Piñera dijeron “más vale diablo conocido que por conocer” y en sus campañas optaron por privilegiar a sus compañeros de ruta, sin dejar mucho espacio para nuevos rostros. Se les reprocha además una clara preferencia hacia sus familiares al momento de elegir nuevos colaboradores. Este tema fue explicitado en el 2005 por Clarisa Hardy, ex Ministra de Planificación de Bachelet, con la publicación de “Eliterazgo”, libro que destaca la importancia de las redes sociales en la política y la trascendencia del rol paterno en la socialización en esta industria. ¿Nepotismo? Puede ser. Veamos:


Eduardo Frei Ruiz Tagle
Hijo de Eduardo Frei Montalva, ex presidente de la República (1994-2000), postula de nuevo a la primera magistratura. Senador por varios períodos en distintas circunscripciones. Su hermana Carmen fue senadora por Antofagasta (1990-2006).

En su comando, Magdalena Frei, hija del candidato DC, ha asumido la administración de Océanos Azules, equipo programático de Eduardo Frei. Ve el financiamiento del equipo, la organización de actos masivos del grupo y la página web de la campaña. Considerada como la hija más política y la que más opina sobre contingencia, muchos creen que tiene un gran parecido a su padre. Ingeniero comercial, trabaja en una consultora y es directora de la Casa Museo Frei Montalva y de la Fundación Frei. Está casada con Edmundo Pérez Vergara, hijo de Edmundo Pérez Yoma.


Sebastián Piñera Echeñique
Hijo de José Piñera Carvallo, uno de los fundadores de la Democracia Cristiana. Entre sus hermanos, están José, ex Ministro del Trabajo y de Minería en el gobierno de Pinochet y creador del actual sistema privado de pensiones. Pablo, Subsecretario de Hacienda de Aylwin y de OO. PP. con Bachelet, consejero del Banco Central, director ejecutivo de TVN y actual Gerente General de BancoEstado. Miguel, músico y empresario, probable contertulio de muchos lectores, alegra la noche bohemia de Santiago. Magdalena, directora de Fundación Futuro, lo apoya además en su campaña presidencial.


Su hija Magdalena se encarga de coordinar las reuniones de los grupos Tantauco y es jefa de contenidos de internet en toda la plataforma tecnológica de Piñera, que incluye sitio web, Facebook, Fotolog, Flickr, Youtube y Twitter. Además coordina las reuniones de las 33 comisiones de trabajo del comando. Pedagoga en Historia, dejó su trabajo de profesora en el Verbo Divino para apoyar la candidatura de su padre.


Política autopoiética

¡¿Auto quée…?! Preguntan todos los lectores. Un estudiante de periodismo, haciendo gala de su sapiencia, dirá: “Sistemas que operan clausuradamente en su autoproducción de componentes”. Señales como no entiendo…, hmmmm, no me queda claro, ¿¿¿??? inundan el ambiente. Prosigue el futuro periodista sin inmutarse, consciente de la dificultad de su misión: “Según Humberto Maturana, las moléculas orgánicas forman redes de reacciones que producen a las mismas moléculas de las que están integradas”. A diferencia de lo demostrado por Obama en EE.UU., esto es lo que pasa con la política en Chile: la elite está autogenerando sus futuros componentes.


Resulta razonable, lógico y totalmente comprensible que en un año electoral los candidatos prefieran a sus conocidos en las campañas políticas. ¿Quién mejor que una hija en quién confiar? Lo digo por experiencia propia. El problema no va por ahí. Va en que los partidos políticos, como organizaciones, no están invirtiendo en capital humano, ni están haciendo su labor de reclutamiento y selección, ni están cumpliendo con su rol formativo.


Andrés Jirón Santandreu
Gerente de Operaciones
DB Group
http://www.dbgroup.cl/
Artículo publicado en sitio web www.gestcom.cl

4 comentarios:

Unknown dijo...

En cierta medida, me parece legítimo incorporar hijos o cónyuges a las campañas. Encuentro mucho peor que tan pocos estén dispuestos a retirarse. ¡Debe ser muy bueno!

Unknown dijo...

Yo también creo que no hay problema en nombrar parientes.El problema está cuando se apropian de los cargos y se creen los dueños. ¿Y nosotros qué?

Unknown dijo...

Ayer salió un repiortaje en la Revista el Sábado del Mercurio, en que habla de la falta de renovación de la clase política. Está muy bueno y se refiere a las generaciones sub 45, 40 y 35. Se los recomiendo.

Unknown dijo...

Interesante fue el fenómeno de las primarias en la Concertación. Refleja la poca participación de la gente. Muchos votaron porque fueron llevados en buses, pero sin eso, no lo hubieran hecho.
Pobre democracia chilena