domingo, 20 de abril de 2008

La nueva agenda de modernización del Estado

La reciente propuesta del Ministro del Interior sobre una nueva agenda de modernización del Estado confiere un rol estratégico a la capacitación laboral en el sector público. Al señalar “estoy convencido que la eficiencia es un imperativo ético de la política”, plantea un gran desafío a la administración estatal.

El Ministro del Interior llamó a todos los sectores políticos y empresariales del país a concertar un gran acuerdo nacional para un mejor Estado. Esto representa una gran oportunidad para Chile al instaurar “la orientación a resultados como el principio rector del sector público”. Las propuestas planteadas constituyen un conjunto de medidas con una clara dirección, basadas en un diagnóstico compartido por la gran mayoría de chilenos y que establece la urgencia de un Estado más ágil y con menos grasa en el cumplimiento de sus tareas.

Según una encuesta del CEP de 2006, el 73% de los ciudadanos sostiene que el Estado debe ser reformado con cambios importantes. El Estado debe renovar su política de administración de personal, con incentivos y una carrera profesional. La contratación de buenos directivos surtirá efecto sólo con un mayor grado de autonomía en su gestión y basada en un contrato de desempeño efectivo, con claros indicadores cuantitativos y cualitativos, en los cuales los pilares centrales sean la calidad del servicio a la ciudadanía y la eficiencia en el uso de los recursos.
Existe consenso nacional sobre la necesidad de un Estado moderno que cuente con equipos directivos y profesionales de excelencia, que reconozca la importancia de capacitar a sus funcionarios al igual que las empresas líderes y que esté capacitado para implementar políticas complejas e intersectoriales en que la definición de indicadores de desempeño apropiados, el control de gestión, la rendición de cuentas y la mejora constante de procesos y resultados sea la regla general.

Dentro de las medidas propuestas, Pérez Yoma plantea la creación de una agencia de calidad de las políticas públicas, la profundización del sistema de Alta Dirección Pública y el desarrollo de una relación moderna y de calidad entre sector público y privado que aproveche nuevas oportunidades, como la innovación, promoción de imagen país, tratados de libre comercio o capacitación laboral. Postula también un incremento de remuneraciones que permita atraer candidatos al sector estatal para tener gestores públicos de excelencia. El Ministro del Interior alude además a la necesidad de dar urgencia en el Congreso a temas pendientes tan relevantes como la reforma de los tribunales tributarios, el fortalecimiento de la institucionalidad de la libre competencia, las normas sobre gobiernos corporativos de empresas públicas y Codelco, el nuevo estatuto Pyme, el perfeccionamiento de ChileCompras y la nueva institucionalidad del Fondo de Innovación para la Competitividad.

Una de las principales áreas a perfeccionar en la administración pública es la multiplicidad de estilos de liderazgo. Muchos de los liderazgos actualmente vigentes en la administración pública se han ido elaborando en forma espontánea, de manera autodidacta, carentes de modelos preestablecidos y sin una preparación formal en materia de gestión organizacional. En muchas ocasiones, esto ha dificultado la consecución de los resultados demandados por el país. Para esto, se requiere reforzar los profesionales de calidad y su compromiso con sus labores.

En una encuesta realizada en diciembre de 2006 por el Servicio Civil a la alta dirección pública, sólo un 53,8% responde afirmativamente ante la pregunta “para usted un buen líder es quién logra resultados”. En cambio, un 92,3% piensa que es líder quien “genera adhesión del personal a un proyecto o a la organización”. Esto es una clara señal de las prioridades de muchos gerentes públicos, quienes se concentran más bien en embarcar a sus equipos en un proyecto determinado, que en los resultados propiamente tal.

Chile necesita una reforma amplia del Estado, la que solo es posible si se trabaja con un horizonte ampliamente consensuado, de mediano y largo plazo. Pero antes de reemplazar trabajadores del Estado, resulta mucho más sensato y efectivo establecer con ellos contratos de desempeño efectivo y capacitarlos en el desarrollo de habilidades, aprovechando los amplios conocimientos obtenidos a través de años de práctica.


Andrés Jirón Santandreu
GestCom
Gerente General

Artículo publicado en sitio web http://www.gestcom.cl/.