miércoles, 11 de marzo de 2009

Aprobación del voto voluntario en el Senado

Finalmente, con 26 votos a favor, uno en contra y siete abstenciones, la Sala del senado aprobó la norma que consagra a nivel constitucional la voluntariedad del voto y la inscripción automática en los registros electorales. Después de esto, la iniciativa debe ser enviada a la Presidenta de la República para que sea promulgada como una nueva ley.

Dentro del intrincado proceso legislativo, la norma aprobada es una disposición transitoria que establece que la reforma constitucional comenzará a regir al momento de que entre en vigencia la respectiva ley orgánica constitucional, que deberá regular la forma en que se implementa el nuevo sistema. En consecuencia, la aplicación del voto voluntario e inscripción automática queda sujeta a la dictación de una nueva ley constitucional que defina el modo de operación de la reforma.
A favor de la reforma votaron los senadores Andrés Allamand, Nelson Ávila, Carlos Bianchi, Carlos Cantero, Camilo Escalona, Alberto Espina, Fernando Flores, José García, Jaime Gazmuri, Guido Girardi, José Antonio Gómez, Antonio Horvath, Carlos Kuschel, Juan Pablo letelier, Pedro Muñoz, Roberto Muñoz Barra, Jaime Naranjo, Ricardo Núñez, Carlos Ominami, Jorge Pizarro, Baldo Prokurica, Mariano Ruiz-Esquide, Hosaín Sabag, Guillermo Vásquez, Adolfo Zaldívar y Sergio Romero. En contra lo hizo el senador Jaime Orpis, y quienes se abstuvieron fueron los senadores Jorge Arancibia, Andrés Chadwick, Juan Antonio Coloma, Hernán Larraín, Pablo Longueira, Evelyn Matthei y Víctor Pérez.
Sería importante para los ciudadanos el conocer las razones que motivaron sus votaciones, de manera de posibilitar un control de responsabilidad política sobre los parlamentarios que fueron elegidos con nuestros votos.
Artículo publicado en sitio web www.politicastereo.tv.

1 comentario:

Unknown dijo...

Francamente no logro entender estas votaciones. ¿Son por órdenes de partido, por creencias personañles o por intereses individuales?

No es comprensible para el ciudadano promedio entender el voto en contra de Orpis. Las abstenciones tampoco quedan claras.