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lunes, 27 de febrero de 2012

27F: La necesaria responsabilidad política



No cabe duda que tanto Alianza como Oposición han intensificado sus estrategias comunicacionales ante la conmemoración del segundo aniversario del 27/F. La oposición, basando su argumentación en el retraso de las obras de reconstrucción, en especial en materia de viviendas; la Alianza -secundada por el Ejecutivo- en la ineptitud de las tomas de decisiones en la fatídica noche del terremoto. Pareciera que ninguno de los dos conglomerados está dispuesto a restarse de una fácil victoria comunicacional con miras al 2013.


Sin embargo, con la teoría del empate (noche 27/F vs reconstrucción) una vez más sólo pierde la ciudadanía. ¡Que cada político asuma su responsabilidad por lo que le corresponde! Es así que el anuncio de la fiscal Solange Huerta de las inéditas formalizaciones a ocho autoridades de la época por las muertes del terremoto constituye un duro golpe a la impunidad política que siempre ha reinado en nuestro país. Aunque las defensas corporativas no tardaron en llegar justificando las poco acertadas decisiones de los encargados del manejo de la emergencia con la poca información que habrían dado organismos técnicos como el SHOA, el Centro de Alerta Temprana (CAT) o la ONEMI, la ciudadanía ya se ha formado una opinión sobre la toma de decisiones -o falta de decisiones-de esa trágica noche. De acuerdo al último sondeo del Centro de Encuestas de La Tercera, el 61% de los encuestados cree que la ex Presidenta Bachelet tiene responsabilidad en la demora por la alerta de maremoto. El 37% sostiene que el desempeño del Ejecutivo esa madrugada fue “muy mal” o “mal” y un 34% “regular, lo que obviamente no constituye una buena evaluación ciudadana.


No obstante, pareciera que la decisión de no decretar el estado de emergencia no se basó en la falta de información. Según el alcalde del archipiélago de Juan Fernández, Leopoldo González, él habría hablado telefónicamente con la Presidenta Bachelet a las 6.30 del 27 de febrero, advirtiéndole de la tremenda marejada que había azotado la isla. No se requiere ser sismólogo, geógrafo o geofísico para decretar una alerta de maremoto con esos antecedentes. Menos aún, existiendo un primer fax enviado por el SHOA a las 4.07, con una inicial alerta de tsunami. A pesar de la falta de información técnica posterior, nadie en su sano juicio hubiera dudado de la urgencia del aviso de la autoridad edilicia de Juan Fernández en ese trágico amanecer. De hecho, aunque la mayoría de las olas ya habían llegado a la costa chilena con su estela de muerte y destrucción, la última -a las 7 de la mañana en Dichato- costó la vida de 12 personas. Por consiguiente, aunque la ex mandataria tuvo la confirmación oficial de la alerta de tsunami a las 4.07 en un fax del SHOA -luego desvirtuado por radio-, resulta difícil sostener que no tuvo indicios para decretar una alerta de tsunami. En forma lamentable, la opinión pública no ha podido conocer la versión de los hechos la propia ex Jefa de Estado, quién ha evitado las declaraciones al respecto en sus cortas y discretas vacaciones en Chile. Según dicen sus cercanos, este silencio ha sido para no entorpecer la investigación judicial, lo que supone que después de las formalizaciones que hará en mayo la fiscal Huerta se conocerá los descargos de la ex mandataria. Las 181 víctimas fatales de la tragedia justifican una explicación a la opinión pública, de manera que no vuelva a repetirse la descoordinación de esa noche ante una emergencia similar.

Por otra parte, las acusaciones contra la lentitud de los trabajos de reconstrucción post terremoto evidencian un cambio de paradigma en la ciudadanía, la que exige sus derechos. Está claro que no se seguirá aceptando ineficiencias como las demostradas en el tsunami ocurrido en Aysén el 21 de abril de 2007 o la reconstrucción de Tocopilla, después del terremoto del 14 de noviembre del mismo año. Y aunque el Gobierno estime que se ha avanzado el 68% en las obras de reconstrucción de las zonas afectadas por el sismo del 2010, todavía existe una importante deuda pendiente en materias de vivienda. Aunque en materias de obras públicas esté ejecutado el 99,8% de lo proyectado o que en materia de salud el 100% de los establecimientos esté operativo, no compensan a los damnificados por la pérdida de sus viviendas. La entrega de 100 mil subsidios durante el 2010 o de 220 mil en el 2011 no son soluciones definitivas, desvirtuando las glamorosas declaraciones gubernamentales respecto al cumplimiento de los objetivos fijados.


Las regiones afectadas, la ciudadanía, los electores, Chile, la sociedad globalizada, y, en general el mundo ha cambiado, y se empieza a instalar un nuevo concepto: la efectividad de la responsabilidad política. Hasta hace poco tiempo atrás, ésta era una sarta de declaraciones líricas que hacían las autoridades ante la opinión pública, pero vacías de acciones concretas. Hoy la ciudadanía castiga la teoría del empate y las defensas corporativas. En cambio, comienza a exigir que cada político asuma la responsabilidad de sus acciones, al igual que cualquier otro trabajador chileno.


Columna publicada en La Tercera Online

jueves, 15 de abril de 2010

Gobierno: al ritmo de la cumbia de los picados


La redefinición de identidad política no sólo incumbe a la Concertación, sino que también concierne a la Coalición por el Cambio. Acostumbrada a estar en la oposición durante 20 años, la Alianza por Chile todavía no asume su rol comunicacional de conglomerado oficialista en la construcción de la agenda pública.

Las fuertes críticas del senador Allamand (RN) al gobierno del Presidente Piñera provocaron un revuelo en el ámbito político. En el programa Entrevista del Domingo de TVN y días antes del lanzamiento de su libro “La estrella y el arco iris” -escrito junto a su pareja, la diputada Marcela Cubillos (UDI)-, el parlamentario acusó de desprolijidad comunicacional al proceso de instalación de la nueva administración, además del ya denunciado conflicto de interés derivado de la propiedad de Chilevisión.

Las inmediatas declaraciones de la senadora Matthei -en gira oficial en EE.UU.- sobre estos comentarios del senador Allamand, sólo hicieron escalar el conflicto. Su expresiva referencia a la poco conocida “cumbia de los picados” le agregó sabor regional a su respuesta, confirmando de paso la existencia de potenciales díscolos en la derecha y una importante señal de división en la Coalición por el Cambio. Bien lo supo la ex Presidenta Bachelet en su conglomerado, cuando al inicio de su mandato intentó propulsar un “gobierno ciudadano”, provocando el rechazo de los partidos políticos oficialistas. Este “gobierno de excelencia” también podría seguir los mismos pasos.

A su vez, en vez de retractarse y con una mayor cobertura, el parlamentario insistió en sus cuestionamientos, señalando que todos los dirigentes de la Coalición por el Cambio eran partidarios de que el mandatario se desprendiera de Chilevisión. Además de ser un flanco abierto desde el 17 de enero, este previsible conflicto de interés cobró visibilidad una vez resuelta la venta de Lan. Las conciliadoras declaraciones en Santiago de la ministra vocero de Gobierno, Ena Von Baer, pasaron prácticamente desapercibidas y no lograron desescalar el conflicto ya desatado.

Por su parte, el Presidente Piñera rápidamente se vio obligado a responder los cuestionamientos del parlamentario. En plena visita oficial en Washington, al ser entrevistado en el programa Panorama Mundial de CNN en Español, la periodista Patricia Janiot -además de consultarle por los ineludibles conflictos de intereses- le preguntó por las críticas del senador Allamand. En específico, se refirió sobre las acusaciones de personalismo presidencial y la falta de figuras políticas en el gobierno.

A pesar de que el mandatario contestó en forma general, sin explayarse innecesariamente en el tema ni entrar en detalles pequeños, la oportunidad no favoreció al Jefe de Estado. La extensa cobertura de la red de televisión -señal de 24 horas de noticias dirigida al mercado latinoamericano- y la atención de los medios nacionales e internacionales en esta visita oficial sirvieron para consolidar el conflicto interno entre partidarios del Presidente Piñera. La escenografía de CNN tampoco contribuyó a minimizar la respuesta: el formato del extracto difundido -plano medio del mandatario- hizo recordar los anuncios realizados en las cadenas nacionales en nuestro país. Si en vez de la Casa Blanca hubiera estado La Moneda, la respuesta del Presidente al parlamentario hubiera parecido una red voluntaria de radio y televisión.

En contrapartida, el plan de reconstrucción nacional quizás requiera una mayor solemnidad en su presentación. Con una audiencia acostumbrada a frecuentes cadenas nacionales en el gobierno de la ex Presidenta Bachelet -en especial en el último año-, un proyecto de tanta relevancia social no debiera ser anunciado en forma tan interrumpida y difusa. El equipo comunicacional de la ex mandataria no hubiera desperdiciado oportunidad tan grande para reforzar el rol del gobierno ante la opinión pública.

En cambio, las actuales medidas han sido comunicadas a través de esporádicos y desordenados anuncios: tras una reunión con el Comité Ejecutivo de la CPC, en anuncios ocasionales desde Nueva Orleans o Washington , presentación de planes aislados de carteras o posibles fuentes de financiamiento. De hecho, los parlamentarios de oposición ya anunciaron su rechazo al reciente proyecto para el Fondo de la Reconstrucción e Incentivo a las Donaciones presentado al Congreso.

Un plan tan relevante para el país y con un presumible rechazo de la oposición, no puede ser comunicado a gotas mientras el Presidente está de gira en el extranjero. Menos aún, el pedir desde la distancia al Congreso -trinchera de la oposición-, una rápida aprobación al plan de reconstrucción. Estas medidas sólo producen un desgaste innecesario en un debate estéril que distrae la atención de los temas prioritarios.

Sin embargo, la próxima presentación del plan de reconstrucción nacional puede ser una gran oportunidad para un despliegue comunicacional. El gobierno y la Coalición por el Cambio deben asumir con mayor solemnidad, responsabilidad y profundidad su rol en la construcción de la agenda pública.

Columna publicada en latercera.com: http://blog.latercera.com/blog/ajiron/entry/gobierno_al_ritmo_de_la