
El anuncio de un ambicioso y agresivo plan busca combatir el rápido deterioro de las expectativas del mundo privado, que ha optado por postergar proyectos, disminuir inversiones y rebajar dotaciones de persona. El paquete, que incluye 11 medidas, abarca distintas áreas.
Entre ellas viene un estímulo a la capacitación que se expresa en dos acciones concretas:
1. Reajuste del valor máximo subsidiado por la franquicia tributaria Sence.
2. Descuento mensual del gasto en capacitación del PPM de las empresas.
La llegada de la crisis requiere una revisión de las expectativas de corto y mediano plazo, y todas las organizaciones requieren de una adecuación de sus estrategias. Si los pronósticos cambian, necesariamente las estrategias deben adecuarse a este nuevo escenario. Para su evaluación y rediseño, se necesitará de tiempo y esfuerzo.
Ante la disminución de la actividad, surge la oportunidad de aprovechar el momento para identificar las oportunidades de mejora, eliminando las fuentes de fuga de energía organizacional. Antes de incurrir en despidos innecesarios que más tarde se pueden lamentar, sería conveniente invertir en capacitación de los colaboradores, aprovechando su mayor disponibilidad de tiempo. El desarrollo del capital humano de la organización podrá convertirse en una ventaja competitiva en el futuro. Más aún, si dentro del plan de reactivación se incluyen algunas medidas relativas a la capacitación.
Con estas medidas, debería aumentar la capacitación de los trabajadores de las empresas, reforzando y agregando valor al capital humano de la organización.
Andrés Jirón Santandreu
Gerente Comercial
DB Group
www.dbgroup.cl
Artículo publicado en sitio web www.gestcom.cl y www.dbgroup.cl
No hay comentarios:
Publicar un comentario